Kenia
EL PLAN DE PORIA
Ir a la escuela, convertirse en una líder y acabar con los obstáculos a los que se enfrentan las adolescentes masái.
#Educación
Poria estudia en una escuela en Kenia donde muchas de las niñas masái han escapado del matrimonio precoz o la mutilación genital femenina. En este vídeo explica cómo la inesperada oferta de un amable vecino la llevó a transformarse a sí misma, a sus compañeras y a su comunidad.
“Seremos mujeres destacadas en la sociedad: mujeres valiosas, mujeres que pueden depender de sí mismas... y seremos grandes líderes”.
"Si eres perezosa, por favor inténtalo en otra escuela."
Poria acababa de llegar al lugar que sería su hogar durante los próximos cuatro años cuando vio este mensaje en la puerta de la oficina del director de la escuela. Fue entonces cuando se dio cuenta de que estaba exactamente donde quería estar.
"Supe en ese momento que este es un lugar donde se trabaja duro", recuerda la ahora adolescente de 16 años, añadiendo que se prometió a sí misma que algún día se iría como "alguien diferente" y que ella y sus compañeras serían "grandes mujeres en la sociedad: mujeres valiosas, mujeres que pueden depender de sí mismas... grandes líderes”.
No quería ser otra chica masái casada que depende de su esposo para todo. "Puedo decir que, si no estuviera en esta escuela, mi vida sería totalmente miserable", dice. "Tal vez habría terminado casada o lavando ropa".
La escuela: la gran oportunidad de Poria
Desde hace dos décadas, la educación primaria en Kenia es gratuita, sin embargo, solo el 48% de las niñas masái están inscritas, y solo el 10% llega a la secundaria. "La mayoría de las personas masái no valoran la educación", dice Poria. "Pero me sorprende que mi papá sea una de las personas que realmente la valora. Ha visto cómo la educación, a través de mis hermanas mayores, está transformando a las mujeres, así que ha elegido educar a todas sus hijas e hijos".
Poria consiguió entrar en un internado de niñas en el condado de Kajiado después de que la hija de sus vecinos quedara embarazada y no pudiera asistir.
Hoy en día, se siente parte de una hermandad. Hasta el 80% de las niñas que asisten a la escuela son masái; muchas de ellas han pasado por la mutilación genital femenina los matrimonios tempranos y han "logrado escapar y venir a esta escuela", explica Poria.
Una hermandad que defiende los derechos de las niñas
Uno de los momentos favoritos de Poria es cuando las chicas se reúnen semanalmente en el club de Orientación y Asesoramiento. Aquí, comparten sus historias y hablan sobre los problemas que enfrentan.
"He conocido a otras mujeres jóvenes que son como hermanas para mí, y nos entienden más que nuestros padres en casa", dice Poria. "He conocido a mujeres masái que asistieron a esta escuela y ahora son maestras aquí. Esto me anima. Son una gran inspiración en mi vida".
Uno de sus sueños es viajar fuera de su país para ver el mundo, y otro es asistir a la universidad y estudiar medicina. Poria espera que, cuando ella sea médica, sus ex compañeras de clase trabajen en bancos, otras instituciones o sean profesoras.
“Queremos vernos como líderes de movimientos, activistas, impulsoras del cambio, dirigentes y representantes políticas”
María, España, 24 años
Informe "Equal Power Now: niñas, mujeres jóvenes y participación política"
El nuevo informe elaborado por Plan International a partir de encuestas y entrevistas a casi 29.000 chicas, en 29 países, incluido España, revela que las niñas y las jóvenes afrontan importantes obstáculos cuando quieren participar en acción política:
El 96% de las jóvenes considera que participar en política es importante.
El 74% de las jóvenes tiene alguna experiencia de participación o compromiso con la política.
El 14% de las chicas que aspiran a participar en política se ven a sí mismas presentándose a un cargo político.
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Cómo ha ayudado Plan International
Poria participa en el programa ‘Break Free’ de Plan International, cuyo objetivo es mejorar la salud sexual y reproductiva y el bienestar de la adolescencia, y promover la igualdad de género. También tiene como objetivo mejorar el acceso a la educación porque cuanto más tiempo permanece una en la escuela, menos probable será que se case antes de los 18 años y tenga hijos siendo adolescente.
En las sesiones semanales de Orientación y Asesoramiento, los maestros y mentores de Plan International hablan sobre temas relacionados con la salud sexual y reproductiva y los derechos. "Discutimos diferentes temas con las chicas y tratamos de hacerlas sentir cómodas en la escuela", explica Esther Marona, maestra en la escuela de Poria. "Les ayudamos a protegerse contra la mutilación genital femenina, los matrimonios tempranos, las drogas y el abuso de sustancias. Estas adolescentes están pasando por mucho en sus vidas, y tratamos que tengan un sentido de pertenencia".
FIN DE LA MUTILACIÓN GENITAL FEMENINA PARA 2026
En 2011, Kenia aprobó la Ley de Prohibición de la Mutilación Genital Femenina. Ahora es un delito, con pena de cadena perpetua si resulta en la muerte de una niña. En 2021, el presidente de Kenia se comprometió a acabar con todas las formas de violencia de género para 2026.
EDUCACIÓN
Desde que en 2002 la educación primaria pasara a ser gratuita en Kenia, la asistencia escolar ha aumentado en todo el país, excepto en zonas marginadas. Muchos abandonos escolares se deben a matrimonios tempranos, MGF y pobreza. En Narok, solo una de cada 15 niñas inscritas en la escuela primaria llega a secundaria.
En números:
- El 15% de las mujeres entre 15 y 49 años en Kenia han sido sometidas a la ablación.
- La prevalencia de la mutilación genital femenina ha disminuido, del 38% de las mujeres (de 15 a 49 años) en 1988 al 15%.
- El 45% de estas mujeres fueron sometidas a la mutilación genital femenina entre los 10 y 14 años, y el 30% entre los 5 y 9 años.
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